En el Juicio Oral por las 81 muertes en el incendio de la cárcel San Miguel, la Fiscalía Sur aseguró que se logró establecer que pese a que existía un plan de contingencia vigente en 2010 no había sido instruido al personal del recinto penitenciario. La información fue entregada en el tercer día de testimonio del ex director nacional de Gendarmería Luis Masferrer, quien cierra mañana la etapa de pruebas del Ministerio Público y que dará paso a la exposición que prepara la defensa ante el Tribunal.
Un positivo balance realizó la Fiscalía Sur a un día que termine su entrega de pruebas que se extendió por cerca de siete meses en el Juicio Oral que se realiza en contra de ocho funcionarios de Gendarmería acusados de cuasi delito de homicidio por las 81 muertes generadas en el incendio de la cárcel de San Miguel y que además terminó con 16 heridos y más de 200 evacuados.
El persecutor de la Fiscalía Metropolitana Sur, Víctor Núñez, indicó que esperan el término del juicio para abril, cuando la defensa descargue todas sus pruebas, en las que se incluirán videos de las cámaras de seguridad.
Según el fiscal, con el último testimonio del ex director de Gendarmería Luis Masferrer se logró establecer que existía un plan de contingencia contra incendios vigente en 2010 y que no había sido difundido ni instruído al personal del penal.
Situación que el alcaide del recinto penitenciario Segundo Sanzana, uno de los 8 imputados en el caso reconoce ante el que fue la principal autoridad de Gendarmería en ese momento, por medio de un documento que fue leído en el Sexto Tribunal Oral en Lo Penal de Santiago.
Según la defensora penal pública Viviana Catell, quien representa al ex Director Regional de Gendarmería, Carlos Bustos, los operativos y medidas estaban socializadas en la cárcel. Agregando que si bien se leyó un documento por parte de Masferrer y que la Fiscalía ha presentado una serie de pruebas, no ha logrado conectarlas con la tesis de negligencia que plantean.
La defensa que comienza su exposición de pruebas durante esta semana, plantea que la tragedia se relaciona con las precarias condiciones de diseño y de infraestructura de la cárcel.
Los gendarmes acusados son José Poblete, Fernando Orrego y Francisco Riquelme, y los oficiales José Hormazábal, Patricio Campos, Segundo Sanzana, Carlos Bustos y Jaime San Martín.