Un fiscal español ha solicitado al juez que pida al Barcelona el contrato de Neymar antes de decidir si cabe admitir la demanda presentada contra el presidente del Barcelona, Sandro Rosell, por apropiación indebida en el fichaje de la estrella brasileña.
El fiscal de la Audiencia Nacional, principal instancia penal española, José Perals, ha solicitado también al juez que pida las memorias económicas de la junta directiva del Barcelona de los años 2011, 2012 y 2013 antes de decidir si es favorable a que se tramite la denuncia presentada por un socio del Barça contra Rosell, según el escrito del fiscal hecho público este lunes.
La querella contra Rosell fue presentada por el socio del Barcelona, Jordi Cases, por un supuesto delito de “apropiación indebida en su modalidad de distracción” en el fichaje de Neymar y el pago de 40 millones de euros a la sociedad N&N, propiedad del padre del jugador brasileño.
Según la querella, el Barcelona contrató al astro brasileño por “57,1 millones de euros (17,1 millones en concepto de derechos federativos y 40 millones a la sociedad N&N). A dicha cantidad habría que añadir 7,9 millones de euros por un acuerdo sobre tres jugadores del Santos (…) y 9 millones de euros por dos partidos amistosos”.
“Según el querellante tal contrato se mantiene oculto a los socios del F.C. Barcelona por lo que no se conoce el destino real de los 40 millones de euros supuestamente pagados al jugador o a sus representantes legales”, dice el escrito del fiscal, que añade que el querellante “imputa, en consecuencia, al querellado, máximo representante del F.C. Barcelona, la comisión de un delito de apropiación indebida”.
Por ello, el fiscal pide que se le proporcionen “el contrato o contratos” de Neymar y las memorias económicas con el fin de averiguar si es cierto que “no se ha facilitado tal información por el presidente del F.C. Barcelona, bien a la junta directiva, bien a los socios a través de la Asamblea General o mediante otro medio de comunicación”.
Una vez que el fiscal comunique si cree que es necesario admitir a trámite la denuncia o no, será el juez Pablo Ruz, quien tenga la última decisión.
Tras conocer la querella el pasado día 9, el portavoz de la junta directiva del club, Toni Freixa, consideró que era “una denuncia temeraria e infundada que perjudica la imagen del club”.
