Sergio Bobadilla se ausentó del Congreso junto a 7 de sus colegas del oficialismo, lo que no permitió que a principios de mes se aprobara el sueldo mínimo. Ahora de regreso a Chile aseguró que su viaje -compartido con otros dos parlamentarios gremialistas del Bío Bío- fue absolutamente privado

El pasado 9 de mayo la Central Unitaria de Trabajadores, advertía el fracaso del día anterior del veto presidencial que apuntaba a un sueldo mínimo de 205 mil pesos, porque ni siquiera a los diputados de Gobierno les interesó aprobar la iniciativa, relataba el presidente provincial de la CUT Sergio Gatica.

Y es que al oficialismo en la ocasión le faltaron 8 votos, de parlamentarios que se ausentaron de la discusión, tres de ellos de la UDI y del Bío Bío.

Se trata del presidente regional gremialista Iván Norambuena, Jorge Ulloa y Sergio Bobadilla, quienes con parte de sus familias y amigos se trasladaron hacia Roma en un viaje que pese a la información que se entregaba desde sus oficinas era oficial del Congreso, finalmente correspondió a un traslado particular.

Así lo evidenció Bobadilla, quien explicó cómo se falta al trabajo en el Congreso, incluso pareándose en la discusión del día, pudiendo ejercer su voto; único de los ausentes del Bío Bío que se puso de acuerdo para que su voto no se perdiera en aquella discusión, según la web oficial de las votaciones del Congreso.

A su vez, Bobadilla explicó que no hubo pagos comprometidos de fondos públicos, ni tampoco un tirón de orejas desde el Gobierno por ausentarse de tan relevante discusión.

Jorge Ulloa, también mencionó que el viaje corresponde a sus vidas privadas y que se pareó antes con su par de Talcahuano, el PPD Cristián Campos, eso sí ese pareo no se hizo efectivo para el sueldo mínimo.

Los parlamentarios no entraron en detalles de si establecieron o no contacto con empresas en el extranjero, o si hubo auspicio de algún privado o interés de otro tipo en el viaje. Eso sí recalcaron que éste sólo se remitió al ámbito personal, privado y particular.