El Jefe Provincial de Educación de Puerto Montt señaló que la resolución judicial que ratifica en el cargo a la directora de la Escuela España representa un gran respaldo a los docentes que se ven involucrados en problemas con la comunidad educativa.
Con relación a la manifestación de “brazos caídos” en una escuela de Llanquihue, señaló que el Ministerio de Educación (Mineduc) no puede interferir en las decisiones del jefe comunal.
En el primero de los dos conflictos, la Corte de Apelaciones de Puerto Montt le dio la razón a la directora de la Escuela España de Puerto Montt, Margot Oyarzún, quien interpuso un recurso de protección luego que en octubre del año pasado fuera separada de sus funciones directivas tras un problema de convivencia escolar denunciado por apoderados.
El máximo tribunal de la capital regional ordenó el reintegro de la funcionaria, quien ganó un concurso público para ejercer el cargo hasta el año 2015 en dicho establecimiento municipal.
Al respecto, el jefe provincial de Educación, Patricio Catalán, señaló que esta resolución representa un “espaldarazo” para todos aquellos docentes que se ven involucrados en problemas con la comunidad educativa.
Respecto a la manifestación de “brazos caídos” que impulsó la semana pasada el Centro General de Padres de la escuela básica Inés Gallardo Alvarado de la comuna de Llanquihue, Catalán indicó que entiende el malestar de los apoderados por el cambio de directora que hubo en el establecimiento, también a través de un concurso de Alta Dirección Pública, pero aclaró que la opción de escoger entre una terna final de profesionales es exclusiva del jefe comunal, por tanto se acoge esto a derecho.
Señaló finalmente que de acuerdo a la normativa vigente es ahora la Superintendencia de Educación el encargado de recepcionar denuncias de parte de la comunidad educativa, comprometiendo en lo que le compete ayuda técnica y pedagógica hacia las distintas direcciones educativas municipales de la provincia.
