El ministro de Hacienda, Felipe Larraín, sostuvo este jueves que para el Gobierno sería ideal que el Presupuesto 2013 se apruebe antes del plazo máximo estipulado para su discusión, y no se tenga que estar tratando el tema hasta el último día.

“Nosotros estamos disponibles para estar hasta el último día, pero ojalá que podamos tener una discusión en la cual podamos llegar a un período de tramitación que no cope los 60 días del presupuesto, y donde primen las disposiciones al diálogo y avanzar en los temas que nos interesan como país”, manifestó el secretario de Estado al hablar con la prensa en el Palacio de La Moneda.

Junto con afirmar que es indudable que la Concertación tiene que cumplir su rol opositor y de fiscalización, el jefe de las finanzas públicas explicó que “nosotros esperamos una discusión presupuestaria con buen ánimo por las dos partes”.

Larraín igualmente señaló que “en particular hay algunas declaraciones que se han visto en el último par de días respecto a los temas presupuestarios que nos permiten tener un cierto optimismo respecto de cómo vamos a encarar esta discusión entendiendo que siempre es una discusión compleja, entendiendo que es un gobierno que no tiene mayoría en ninguna de las dos cámaras, pero uno esperaría una discusión en que el presupuesto no se apruebe el último día si eso fuera posible”.

A renglón seguido sostuvo que espera que se dé una discusión que permita llegar a puerto con un buen presupuesto, que se haga cargo de los compromisos del programa de gobierno y a la vez que este dentro de los marcos de lo que se puede hacer.

“En ese sentido, yo quiero dar una tranquilidad, en primer lugar a los chilenos y chilenas, no vamos a hacer nada de lo que después nos tengamos que arrepentir”, puntualizó el ministro de Hacienda.

Felipe Larraín afirmó también que “hay países que hoy día están viviendo situaciones muy complejas, situaciones que tienen su origen en políticas fiscales insostenibles, políticas que hoy día están requiriendo ajustes muy dolorosos, Chile no quiere ir por ese camino, Chile quiere ir por el camino de la responsabilidad, entendiendo que no todos los problemas se solucionan en un año, pero que tenemos que seguir progresando en forma gradual, en forma sostenida, en los objetivos sociales, económicos que nos hemos planteado”.