Ser víctima de un asalto es uno de los mayores temores de todo encargado de una tienda, sin embargo, para el administrador de una estación de servicio en Gold Cost, al oeste de Australia, sufrir un robo a mano armada pudo ser una experiencia inusualmente agradable.

Esto porque el ladrón resultó ser nada menos que una agraciada joven rubia, la que no sólo abordó al vendedor con la mejor de sus sonrisas, sino también con un generoso escote capaz de -apropiadamente- robar todas las miradas.

Luego del impacto inicial, la chica extrajo un cuchillo con el cual amenazó al encargado, pero desde ahí demostró su incompetencia en el mundo del delito: usó su mano sin guante para abrir la caja registradora, por lo que dejó sus huellas dactilares por todo el lugar.

Posteriormente, la joven huyó hasta el exterior, donde la esperaba un hombre en una camioneta 4×4.

“Hubo varias amenazas reales de herir al encargado, pero ella huyó sólo con una pequeña cantidad de dinero”, indicó la policía local al canal Nine News, según recoge el NY Daily News.

Finalmente, la policía señaló que no sería muy difícil rastrear a la joven. Y claro, probablemente ganas no les falten.

http://youtu.be/GPj6UbjMMcA