Una grave denuncia pesa contra la caja de compensación 18 de Septiembre, acusada de otorgar a un hombre de 86 años un millonario crédito social que éste no solicitó. El préstamo además fue pactado al máximo de cuotas, lo que obliga a la persona a pagar más del doble del dinero que nunca pidió. La PDI ya determinó que la firma y huella digital que constan en la solicitud aprobada por la caja, son falsas.
Otra vez una caja de compensación en la mira. La denuncia apunta a que 18 de Septiembre otorgó un crédito social -de 3 y medio millones de pesos- a José Raúl Baeza Muñoz (86), sin que éste lo solicitara, según denunció el abogado Antoine Peñaloza.
José Baeza aparece afiliado el 1 de diciembre de 2010 a la entidad y 5 días después fue concedido el préstamo, en 60 cuotas de 136 mil pesos, o sea, un total de 8 millones. Más del doble.
El descuento apareció en la liquidación de sueldo del ISP. Por ello, el denunciante viajó junto a su familia desde Quillón, donde reside, para dirigirse a la oficina penquista y saber cómo fue suplantado con una firma y una huella dactilar que no son suyas, según determinó una perito en huellas dactilares de la PDI.
El abogado Peñaloza saca sus conclusiones.
El denunciante ha pagado cuotas por más de un año, pese a las peticiones formuladas a la caja 18 de Septiembre.
La agente de la caja en Concepción, Silvana Bustos, sostuvo que la entidad investiga internamente el caso y que, a la espera del fin de la indagatoria de la Fiscalía, se suspendió el cobro de las cuotas.
La denuncia fue presentada en mayo del año pasado y la investigación está en manos del fiscal Guillermo Henríquez, de la unidad de delitos económicos de la Fiscalía local penquista, quien ha decretado numerosas diligencias, las que en este tipo de casos suelen tardar meses. El abogado Peñaloza sostiene que se configuraría el delito de falsificación y uso malicioso de documentos privados.
