Kenia celebrará el 4 de marzo de 2013 elecciones generales, las primeras desde los comicios sangrientos de diciembre de 2007, para poner fin con las rivalidades entre el presidente Mwai Kibaki y su primer ministro Raila Odinga, a la cabeza de un frágil gobierno de unión nacional.

“Vamos a someternos a una decisión de la corte constitucional (…) que nos pide organizar elecciones 60 días después del fin de la legislatura”, declaró Ahmed Issack Hassan, presidente de la comisión electoral independiente (IEBC).