Hace sólo unos días se informó a los penquistas que el mítico cabaret “Tía Olga” sería vendido, algo que causó nostalgia en quienes compartieron alguna vez en el local. La realidad, no obstante, es que se vende sólo la propiedad -que consta de 1.100 metros cuadrados, 22 habitaciones equipadas y dos salones, entre otras cosas- pero no el nombre del popular recinto.

Quienes compren este local, el cual posee sus patentes comerciales de cabaret de primera categoría, podrán seguir en el rubro si lo desean, pero el nombre de la “Tía Olga” es marca registrada y eso no está a la venta.

Así lo confirmó el corredor de propiedades, Pablo Ruíz, quien vendió la propiedad la primera vez.

Al respecto, se informó que existirían varios interesados en las dependencias del popular local penquista, pero que la marca quedó en manos de la nieta de Olga Valdivia Torres y, según se señaló a La Radio, ésta no volvería a ser usada.