Incautación de pasta base, marihuana, cocaína, pastillas de uso farmacológico, armas hechizas y teléfonos celulares, todo en poder de internos, es el resultado de un plan de seguridad impulsado por Gendarmería en la Región del Bío-Bío vista la contingencia de Fiestas Patrias que suele evidenciar un ambiente de efervescencia en las unidades penales.

El saldo registró casos de connotación pública que sindican a visitas como autores directos en el delito de microtráfico al ser sorprendidos infraganti por personal de Gendarmería cuando intentaban ingresar droga al penal.

Recién ayer fueron pesquisados tres sujetos en el control de la cárcel El Manzano, cuyo hecho fue notificado a la brevedad con el Ministerio Público.

A diferencia de años anteriores, en el presente no hubo incautación de chicha o alcohol artesanal en poder de los internos, al no contar con alimentos que sirven de insumo en preparaciones artesanales. Ello guarda directa relación con la erradicación total de cocinillas en las unidades penales y la prohibición de ingresar alimentos no perecibles.

La disposición del Director Regional describe un intenso calendario de allanamientos y registros en los horarios de encierro y desencierro, así también la superioridad institucional reforzó los servicios con 50 gendarmes alumnos de la Escuela Institucional llegados a la Región por un lapso de 15 días.

“Es una estrategia preparada con anticipación que obedece a la necesitad de evitar alteraciones en el régimen interno o situaciones que amenacen el bienestar de los internos y gendarmes”, indicó el Director Regional de Gendarmería, coronel Francisco Melo, que en días previos ha sostenido un esquema de coordinación con los jefes de unidades penales.

La incautación de elementos prohibidos ha fijado como prioridad localizar utensilios de excavación o cortantes usados por lo general en planes de fuga o situaciones conflictivas.

Plan de contingencia, emanado desde la Dirección Regional de Gendarmería, considera una extensión horaria en el período de visita normal, con el fin de otorgar al interno la opción de compartir en forma digna y más distendida con sus familiares.

El régimen será implementado en las 13 unidades cerradas de la región del Bío-Bío, sin perder de vista un riguroso control en el ingreso y egreso de visitas.