Dirigentes de los campesinos cocaleros iniciaron este jueves un diálogo con el gobierno peruano para poner fin a una huelga que iniciaron hace cinco días en la Amazonia central, al tiempo que desbloquearon una carretera que mantenían cortada y que había aislado la región de Ucayali.

“Nos hemos reunido con el ministro del Interior, Oscar Valdés, y hemos iniciado conversaciones, ha sido una reunión positiva”, dijo a la AFP Serafín Luján, secretario general de la Confederación de Agricultores Cocaleros del Perú.

La oficina de prensa del ministro Valdés confirmó que se efectuó la reunión en la mañana del jueves.

El dirigente sostuvo que “esa es una buena señal y ahora nos estamos entendiendo en el diálogo que será constante” para encontrar soluciones de consenso a sus demandas.

“No somos intransigentes, demostramos que siempre hemos estado dispuestos al diálogo; en ese contexto mis hermanos campesinos ya no bloquean carreteras y dejan pasar a los vehículos”, añadió.

Desde el domingo, cuando se inició la huelga, grupos de campesinos cortaron con troncos y piedras tramos de la carretera Federico Basadre en Aguaytía, en la provincia Padre Abad, departamento de Ucayali, unos 600 km al noreste de Lima.

La vía está despejada desde la madrugada de este jueves y se ha restablecido el tráfico vehicular, informó a la AFP una fuente de la policía regional de Pucallpa, capital de Ucayali.

Luján dijo que tras el inicio de las conversaciones “se podrá levantar la huelga en las próximas horas” en una reunión entre la dirigencia cocalera.

La protesta se inició en rechazo a la “erradicación compulsiva” de los cultivos de hoja de coca, materia básica de la cocaína.

Según el dirigente, se destruyen los cocales de campesinos que venden su producto a la estatal Empresa Nacional de la Coca, que la destina al uso tradicional del mascado de la hoja, y no se acaba con grandes extensiones de personas vinculadas al narcotráfico.

El gobierno señala que la erradicación de los cultivos ilegales de hoja de coca forma parte de su estrategia para combatir al narcotráfico.

El martes el gobierno declaró el estado de emergencia por 60 días en distritos y provincias de los departamentos de Ucayali, Huánuco y San Martín debido a la presencia de remanentes de la agrupación armada Sendero Luminoso, aliada al narcotráfico, y por el cultivo ilegal de la hoja de coca.