Carles Puyol y Ryan Giggs, auténticos símbolos del Barcelona y del Manchester United, buscarán el sábado en Wembley, en la final de la Liga de Campeones, su tercer título europeo de clubes.

Puyol, de 33 años, tras un final delicado de temporada, al estar tres meses fuera del equipo, a causa de una tendinitis en la rodilla izquierda, estará en Wembley.

Su liderazgo en el equipo se ha forjado en las últimas temporadas y se ha convertido en una extensión del técnico Pep Guardiola en el terreno de juego, siendo una de las piezas importantes del Barça en la consecución de los títulos de Liga de Campeones en 2006 y 2009.

El galés Ryan Giggs, por su parte, con 37 años, es una institución en el Manchester United, donde lleva desde 1990, y es junto a Paul Scholes, quien ya no es titular, el único jugador en la actual plantilla que ha ganado las dos últimas Ligas de Campeones con el Manchester United (1999 y 2008).

Giggs, que se encuentra estos días en el ojo del huracán por una relación extraconyugal desvelada por un diputado británico, fue elegido por los aficionados del Manchester United el mejor jugador del equipo de todos los tiempos, delante de George Best y Eric Cantona.

Puyol no tiene tanto eco entre los aficionados del Barcelona, que idolatran más a Leo Messi, Andrés Iniesta o Xavi Hernández, pero para sus compañeros es el auténtico líder.

Es Puyol quien controla a Gerard Piqué cuando se marcha alocado hacia la delantera o le pega un grito pierde un poco de concentración.

“Está físicamente como un chaval de 20 años. Hay que valorarle, por todo lo que hado por el Barcelona”, señala el centrocampista Sergio Busquets.

Dmytro Chygrynskiy, el defensa ucraniano que estuvo en el Barcelona en la temporada 2009/2010, quedó marcado por la personalidad de Puyol, con el que compitió por el puesto de defensa central.

“Puyol para mí es un símbolo del Barcelona. Durante mucho tiempo, al pensar en el Barça veía a Puyol y cuando veía a Puyol veía al Barça. Tiene una fuerza increíble”, afirma el ucraniano.

Pero quien más sabe su valía es el técnico Pep Guardiola. “Sabe que lo quiero mucho. Es un jugador impagable. Está rápido, agresivo y mejor que nunca. Estoy muy contento por cómo le va y por lo que nos ayuda”, afirmó en una ocasión.

Giggs encuentra la misma admiración entre su técnico y compañeros en el Manchester United.

“Es extraño porque la buena forma de Ryan está durando muchos años. Uno podría pensar que con 37 años debería mostrar signos de cansancio, pero no veo ninguna evidencia de eso”, afirma el técnico Alex Ferguson.

“Es tratado como un dios en el vestuario. Es un ejemplo y un líder entre sus compañeros y los jóvenes le piden consejo. Es bonito ver que confían más en su opinión que en la de sus agentes”, añade el escocés.

Wayne Rooney está de acuerdo con los elogios de Ferguson. “Cuando ves jugar a Ryan todo lo que hace parece irreal”, señaló.

Tanto Puyol como Giggs son los jugadores más admirados en sus respectivos vestuarios y su papel en la final puede ser decisivo, al mismo nivel que las estrellas mediáticas como Leo Messi, Andrés Iniesta, Xavi Hernández o Wayne Rooney.