La céntrica Puerta del Sol de Madrid se despertó de nuevo el lunes ocupada parcialmente por el campamento montado desde hace una semana por cientos de jóvenes que reclaman cambios políticos y económicos.
“Nos quedamos al menos hasta el domingo y no descartamos quedarnos aún más”, declaró una portavoz de este movimiento espontáneo que nació el 15 de mayo a través de las redes sociales y se fue ampliando a numerosas ciudades de España y de Europa y América.
“No hemos notado que la gente se haya movilizado menos después de las elecciones (del domingo), todo lo contrario, estamos cada vez más estructurados, la gente viene a ayudarnos”, añadió.
En la Puerta del Sol, los acampados, jóvenes, pero también ancianos y desempleados, seguían organizándose, barriendo la plaza con los empleados municipales, distribuyendo desayunos y reclamando más material.
“¿Alguien nos podría dejar un teléfono fijo? Es para organizar un puesto de llamadas gratuitas”, solicitaba un organizador a través de megafonía.
Este movimiento colorido y pacífico reúne todas las tardes desde el domingo a miles, incluso decenas de miles de personas que reclaman su rechazo de la clase política y de la gestión de la crisis económica.
Aunque las reivindicaciones son de lo más diverso, el desempleo, con una tasa récord del 21,19% y casi el 44% de los menores de 25 años sin empleo, es la más comentada.
Tras la comprensión expresada por el gobierno español, el Rey de España llamó este lunes a “dar un urgente empuje al empleo juvenil”.
“Es necesario no sólo ahondar en la profesionalización, modernización y formación en las empresas, sino también dar un urgente empuje al empleo juvenil”, llamó Juan Carlos I en una intervención en una asociación empresarial.
Otras concentraciones similares congregaron a miles de personas en todas las grandes ciudades españolas.
En Barcelona (noreste), los “indignados” que vivaquean en la Plaza Cataluña decidieron mantener la acampada hasta el próximo domingo y se manifestarán el 19 de junio, dijo el lunes un portavoz.
Y pasada la medianoche del domingo, unos 300 jóvenes que participaron en una asamblea “optaron” por manifestarse el día 19 de junio.
“El 15 definiremos cómo participaremos en la marcha”, dijo a AFP el portavoz.
Al día siguiente de las elecciones municipales que hundieron al Partido Socialista en el poder y que cambiaron el color político de gran parte de los municipios españoles hacia el Partido Popular (PP, derecha), los acampados-indignados “están muy cabreados”, dijo Marcos Piris, de 29 años, informático en paro.
Consultado su opinión sobre los resultados, dijo: “Nadie nos representa”.
“Cada día que pasa nos sentimos menos representados por estos políticos”, “tiene gracia que los que nos metieron en la crisis ahora vengan a decir que nos van a sacar de ella”, declaró.
La plaza emblemática de Barcelona estaba semidesierta respecto a días anteriores, aunque con más tiendas abundantes en lemas y carteles, donde se instalaron varias comisiones, después que la noche electoral del domingo la plaza estuvo menos frecuentada que otros días.