El sábado 4 de abril de 1987 es una fecha que para el mundo católico de Los Lagos no pasa inadvertida, considerando que por primera vez en su historia, un Papa visitó Puerto Montt, navegó por la bahía y se reunió con los miles de fieles que llegaron hasta el campo de marte a escuchar su prédica.

Guardias papales | Foto: Sergio Osses

Guardias papales | Foto: Sergio Osses

Dentro de la organización de la visita papal a Chile, hubo muchas personas que anónimamente trabajaron ayudando a los peregrinos que llegaban de diferentes lugares, o en la seguridad, los guardias papales que con su peto amarillo fueron característicos personajes.

A 24 años de aquella fecha, algunos de los guardias lucen orgullosos sus petos, como ocurrió durante la Fiesta de la Candelaria en Carelmapu, donde un grupo de estos personajes sacó a relucir sus petos y colaboraron una vez más con esta actividad.

Recordando aquel sábado de abril del lejano 1987, don Hugo se emociona, pues el día y la ocasión fue especialmente particular.

En tanto, don Dagoberto recuerda absolutamente todos los detalles de ese sábado, cuando el Papa viajero llegó a tierras sureñas.

En tiempos en que los recuerdos nos trasladan a lo más bello de nuestra historia, estos hombres se sienten felices de portar ese peto amarillo, sencillo pero tan importante que les señala que una mañana de abril estuvieron cerca, muy cerca de Su Santidad.

[Gallery 494 not found]