Encuesta de un grupo transversal de centros de estudio revela que el 69% de la gente votaría si el sufragio fuera voluntario, cifra sustancialmente menor a quienes lo hicieron en los 2 últimos comicios presidenciales.

Pablo Matamoros en Flickr

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El sondeo se denomina “Auditoría a la Democracia” y fue realizado por el Centro de Estudios Públicos (CEP), Proyectamérica, Instituto Libertad y Desarrollo, CIEPLAN y el Programa de Naciones Unidas Para el Desarrollo.

Un 60 por ciento se declara partidario de que la inscripción en los registros electorales sea automática al cumplir los 18 años de edad; un 36 por ciento opina lo contrario; y un 5 por ciento no sabe o no responde.

Un 77 por ciento dice que el voto debiera ser voluntario, cifra que se mantiene estable desde el año 2001; mientras un 22 por ciento se pronuncia en favor de su obligatoriedad; y un uno por ciento no sabe o no contesta.

En tanto, un 69 por ciento asegura que si el voto fuera voluntario votaría en la próxima elección presidencial; un 19 afirma que no lo haría; un 7 señala que depende; y un 5 por ciento no sabe o no responde.

El porcentaje que manifiesta que iría a las urnas con sufragio voluntario es sustancialmente menor a la participación en los dos últimos comicios presidenciales, que se elevó a cerca del 88 por ciento.

El vicepresidente de la Democracia Cristiana, Fuad Chaín, afirmó que este dato refuerza la posición oficial de su partido favorable al sufragio obligatorio, ya que demuestra que, empíricamente, el voto voluntario reduce la participación electoral.

En cambio, el diputado de la UDI Felipe Salaberry opinó que la baja de la participación electoral en cerca de un 20 por ciento en la encuesta respecto a las dos últimas presidenciales es igualmente un buen dato para ratificar las ventajas del voto voluntario.

Argumentó que la cifra se elevaría de manera considerable si la pregunta se hace cerca de algún comicio.

En cambio, en la misma UDI, el diputado Gustavo Hasbún dijo que los resultados llaman a una mirada cautelosa, preocupado particularmente por la baja participación electoral que podría darse en los comicios parlamentarios con el sufragio voluntario.

El sondeo también reveló que un 60 por ciento es partidario de que los chilenos residentes en el exterior tengan derecho a voto sin restricción; un 18 dice que sólo quienes tengan un vínculo con el país; mientras el 17 por ciento estima que no debieran participar en las elecciones.