La oficina en Colombia del alto comisionado de Naciones Unidas para los derechos humanos, condenó este miércoles el secuestro de cuatro mujeres, entre ellas una funcionaria de la vicepresidencia del país, al parecer por guerrilleros del Ejército de Liberación Nacional (ELN).

“La toma de rehenes es una grave infracción al derecho internacional humanitario, absolutamente prohibida por los convenios de Ginebra y constituye un crimen de guerra de acuerdo con el estatuto de la Corte Penal Internacional”, señaló la representación de la ONU en Colombia en un comunicado.

También exigió “al grupo armado ilegal la liberación inmediata y sin condiciones de las defensoras de derechos humanos”.

Las cuatro mujeres fueron plagiadas el viernes pasado en una apartada zona rural del municipio de Teorema, departamento (provincia) de Norte de Santander (fronterizo con Venezuela).

Además de la funcionaria del programa de atención a comunidades en riesgo adscrito a la vicepresidencia de la República, cayeron en poder de los presuntos guerrilleros dos psicólogas y una abogada que trabajan para la organización no gubernamental Fundación Progresar.

El ELN es la segunda guerrilla izquierdista en importancia de las que luchan contra el Estado en Colombia y cuenta con unos 3.000 integrantes, según estimativos oficiales.