El embajador de Estados Unidos en Bogotá, William Brownfield, descartó que el acuerdo militar entre su país y Colombia implique el envío de más tropas estadounidenses al país.

“La intención de los Estados Unidos es seguir haciendo exactamente y precisamente las mismas actividades, las mismas misiones, con lo mismos aviones y los mismos buques, como lo hemos hecho durantes los últimos 10, 20 ó 30 años”, dijo el diplomático.

Brownfield añadió: no vamos a ver más personal de los Estados Unidos, al contrario, vamos a ver menos, vamos a ver los mismo mecanismos de colaboración”.

El embajador estadounidense ofreció esa declaración en la ciudad de Medellín (400 km al noroeste de Bogotá), donde periodistas lo interrogaron sobre una declaración que sobre el tema dio el presidente de Venezuela Hugo Chávez, en Ecuador.

“Habrá que ver qué pasa con las bases estadounidenses”, dijo Chávez tras declararse a la espera de “los hechos” del gobierno del presidente electo de Colombia, Juan Manuel Santos, que se inicia el 7 de agosto.

“Estamos evaluando, habrá que ver si el nuevo gobierno de Colombia viene a ocupar la senda del respeto (…) Pero habrá que ver los hechos, eso no se logra sólo con palabras”, agregó Chávez en el marco de la Cumbre del ALBA en Otavalo (norte de Ecuador).

Chávez “congeló” las relaciones con Colombia en julio de 2009 en reacción al acuerdo militar que fue suscrito en octubre del mismo año, y que autoriza a tropas estadounidenses operar controladamente desde siete bases militares colombianas para la lucha contra el narcotráfico y el terrorismo.