El gobernador del estado de Río de Janeiro, Sergio Cabral, pidió al gobierno federal ayuda de las Fuerzas Armadas brasileñas para las tareas de rescate y atención a víctimas de la tragedia causada por las lluvias, que deja 205 muertos, según el último balance oficial.

Cabral hizo el anuncio a la prensa durante una visita a la favela Morro do Bumba, en la ciudad de Niteroi -unida a Río por un extenso puente-, afectada por un derrumbe de una ladera que la noche del miércoles arrasó unas 45 casas y dejó al menos 26 muertos.

Según el jerarca, efectivos del Ejército, la Fuerza Aérea y la Marina ayudarán en tareas de rescate por los derrumbes registrados principalmente en el municipio de Niteroi -que detenta 125 de los 205 muertos registrados- y el aledaño de Sao Gonçalo, también en el área metropolitana y con 16 fallecidos.

Para atender a víctimas el Ejército anunció que instalará dos hospitales de campaña en Sao Gonçalo.

El viernes por la noche continuaban sin cesar los trabajos de rescate y remoción de restos provocados por el alud en Morro do Bumba, construida hace 25 años en un cerro sobre un depósito de basura. Se estima que habría unas 200 personas enterradas bajo lodo, basura y escombros.