Por si no lo has notado, casi todos los mangos de los sartenes y ollas cuentan con un pequeño agujero casi al final. La mayoría simplemente lo pasa por alto, mientras que otros lo usan para colgar la batería de cocina en orden.

Aunque esa pueda parecer una función adecuada, sus creadores lo pusieron allí por otra razón especifica y que pocos conocen.

Según consigna el diario electrónico Huffington Post, dicho agujero fue creado para poder sostener la cuchara con la que estamos trabajando, y así no dejarla en cualquier parte.

Huffington Post

De esta forma evitamos que se pierda la cuchara y además la mantenemos alejada de alguna posible contaminación que provoque que la comida también sufra el mismo destino.

Por supuesto, este no es el único truco que la mayoría desconoce. Otro ejemplo, son los taps de las latas de bebidas. Estos no sólo se pueden ocupar para abrirlas, sino que también para mantener una bombilla dentro de la lata sin que se salga.