La próxima semana comenzará la investigación desformalizada del presunto caso de espionaje al interior de las oficinas de la Sociedad de Fomento Fabril (Sofofa) y que, a juicio de expertos penalistas, enfrentará una serie de complejidades en su desarrollo.
En tanto, la Fiscalía Regional Metropolitana Oriente nombrará este lunes al persecutor que deberá llevar a cabo la indagatoria.
Mauricio Duce, abogado, profesor de la Universidad Diego Portales y presidente ejecutivo del centro de estudios “Espacio Público”, afirmó que la primera etapa de la investigación deberá recurrir a las personas que tienen acceso a los lugares donde se encontraron las cámaras, así como a los proveedores de los equipos.
A juicio del abogado Pelayo Vial, hasta el momento no existe claridad si los hechos al interior del edificio de la Sofofa podrían constituir el delito de espionaje o bien de violación de morada.
Vial sostuvo que ello dependerá de si los dispositivos efectivamente captaron y enviaron información, o bien si esta información fue utilizada para fines estratégicos, situación que podría derivar en la comisión de ilícitos más específicos.
Respecto a las sanciones que importa el delito de espionaje, la legislación actual contempla la pena de reclusión en su grado mínimo además de una multa que puede ir entre las 50 y las 500 UTM.
Todo ello, sin embargo, depende del resultado de la investigación que quedará a cargo del fiscal que será designado este lunes por el fiscal Regional Metropolitano Oriente, Manuel Guerra.
