Personeros de Gobierno le bajaron el perfil al quiebre que se registra al interior del movimiento sindical chileno, que quedó en evidencia este 1 de mayo durante la conmemoración del Día del Trabajador.

La ministra del Trabajo, Alejandra Krauss, detalló que la Central Unitaria de Trabajadores es autónoma y que las opiniones son diversas y legítimas.

El subsecretario de esa cartera, Francisco Díaz, en tanto, resaltó los dichos de la ministra Krauss y la puesta en escena de las reformas laborales, que a su juicio buscan mejorar la relación entre los propios trabajadores y sus empleadores.

Respaldo transversal a la disidencia de la CUT, que se registra en medio de la marcha paralela a la convocada por la multigremial, que además busca llamar a nuevas elecciones ante las críticas y denuncias de irregularidades.