El presidente de la Asociación Nacional de Oficiales Penitenciarios (ANOP), Alberto Figueroa, dijo estar de acuerdo con las acciones que permitan mejorar el funcionamiento de Gendarmería, pero exigió un “mea culpa” a la ministra de Justicia, Javiera Blanco por los escándalos en la institución.

En conversación con CNN Chile expresó que no permitirán “que por algunos casos se enlode nuestra imagen. Nosotros hacemos un trabajo encomiable”, sostuvo.

“Nosotros cumplimos nuestro deber como gremio de informar las falencias, pero es tiempo de que ella haga un mea culpa y diga en qué ha obrado mal”, agregó el oficial.

La ministra Blanco pidió el despido de 123 funcionarios de Gendarmería por excesos en licencias médicas, que harían incompatible su salud con el trabajo en la institución.

El nombramiento de un civil

Sobre el nombramiento del geógrafo PPD Jaime Rojas como nuevo director nacional de Gendarmería, el presidente de la ANOP consideró que “es un desprecio a la oficialidad (…) respetando su profesión y su carrera como funcionario público, creemos que no somos nosotros quien debe calificarlo. Esperamos que colabore en mejorar los procesos al interior de la institución. Lo que tenemos que extirpar acá es que se siga con la práctica político partidista al interior de la institución”.

Respecto a los cuestionamientos al nuevo director, por una investigación de Contraloría que determinó dobles contratos y servicios prestados sin boleta a la Policía de Investigaciones, Figueroa dijo que “si existen irregularidades, la presidenta tendrá que cambiarlo. Nosotros estamos en un proceso de tener mayor transparencia y no vamos a permitir que eso se vea empañado”, sostuvo.