Los rectores de las universidades públicas no estatales se manifestaron molestos luego de que Michelle Bachelet anunciara el envío del nuevo proyecto de reforma a la educación superior.
El presidente del G9, Claudio Elórtegui, indicó que las universidades públicas no estatales son las grandes perjudicadas con este proyecto.
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Según consignó El Mercurio, Elórtegui indicó que a la U.Austral, U. Santa María, U. de Concepción y universidades católicas se les está eliminando un aporte basal, lo que calificó como “inexplicable e indignante”.
El rector criticó que “es preocupante y revela un sesgo estatista que no podemos comprender, considerando que los objetivos de la reforma, que compartimos, son profundizar calidad y equidad”.
Además, según las minutas, se creará un fondo concursable para la investigación dos años después de que se apruebe la reforma. Si bien el fondo estará disponible para todos los establecimientos que tengan gratuidad, se nutrirá de los recursos que actualmente son parte del Aporte Fiscal Directo que reciben las universidades estatales y del G9 por ley, detalla el matutino.
Al respecto, Claudio Elórtegui criticó que las estatales contarán con nuevos recursos y las universidades agrupadas en el G9 no, por lo que terminarán siendo perjudicadas.
En ese contexto, sostuvo que se les están expropiando fondos basales que estaban recibiendo desde comienzos de los años 60 y enfatizó que si se concreta el proyecto, existirá “una decadencia de las universidades públicas no estatales”, lo que afectará tanto a los académicos, como a los funcionarios y estudiantes.
Se debe consignar que el Consejo de Rectores, que no fue mencionado en la última minuta, efectuará una sesión extraordinaria el 14 y 15 de julio.
