Terminar con las inyecciones del tratamiento básico para la Diabetes tipo 1, es una de las exigencias de niños y adultos que padecen esta enfermedad, quienes se organizaron y marcharon este sábado hacia el Palacio de La Moneda para solicitar al Ejecutivo que financie la terapia de bomba de insulina.

En Chile son aproximadamente 14 mil los pacientes por este enfermedad, de los cuales cerca de 4.500 son niños. Para acceder a la bomba de insulina deben pagar cerca de $500 mil mensuales en insumos, además de financiar el dispositivo que bombea, el que tiene un costo cercano a los $5 millones.

El líder de la campaña y extenista nacional, Hermes Gamonal, manifestó que los pacientes de Diabetes tipo 1 están “esperanzados” en que la bomba de insulina se incluya en el segundo decreto de la llamada Ley Ricarte Soto, que debería estar listo este mes.

Los participantes de la movilización marcharon acompañados por los diputados Karla Rubilar, Luis Rocafull y Marcela Hernando. Estos últimos dos fueron impulsores del proyecto que aún permanecen en el Congreso respecto al financiamiento de la bomba insulina por parte del Gobierno.