La policía israelí anunció que encontró este martes a un hombre desnudo y maniatado en una comunidad beduina en el desierto del Neguev, en el sur del país.
El hombre, que fue hospitalizado en un centro de Ber Sheva, dijo que hacía 15 años que sufría estos malos tratos.
Un portavoz del establecimiento dijo a la AFP que el paciente estaba “estable”.
Los agentes estaban conduciendo una operación para destruir construcciones ilegales de los beduinos en Alfora, en el este de Ber Sheva, cuando escucharon los llantos de un hombre, explicó un portavoz de la policía.
“Se acercaron y encontraron a un hombre desnudo y encadenado a una pared” en el interior de una vivienda.
Según los primeros resultados de la investigación, las autoridades determinaron que el hombre habría sido encadenado por los problemas mentales que sufría y porque había lanzado piedras a los niños de la comunidad.
Los medios de comunicación israelíes dijeron que el hombre era un beduino de 43 años, cuyo rostro estaba cubierto de barro, y que no se había afeitado ni cortado el cabello desde hacía años.
La gran mayoría de los beduinos de Israel viven en el Neguev. Algunos han podido conservar una vida seminómade, mientras que otros han cedido al sedentarismo pero siguen apegados a sus tradiciones.
