El gobierno español saliente se comprometió a cerrar los presupuestos generales del Estado de 2016 en julio, en un documento transmitido a Bruselas.

“El nuevo gobierno adelantará a julio el cierre del presupuesto de 2016”, en lugar de noviembre, “para controlar el gasto público“, señala el documento.

En concreto, las administraciones no podrán presentar gastos extraordinarios después de esa fecha.

España dijo además que está dispuesto a solicitar el pago anticipado del impuesto de sociedades en 2016, lo que aportará 6.000 millones de euros, “tan pronto se haya constituido el nuevo gobierno”.

Madrid espera asimismo obtener 1.000 millones de euros adicionales mediante la lucha contra el fraude fiscal.

Bruselas estudia sanciones contra España por incumplir los objetivos de déficit en 2015, cuando el desajuste en las cuentas públicas alcanzó el 5,1% del PIB, muy por encima del 3% que establece el Pacto de Estabilidad y Crecimiento fijado por la Comisión (4,2%).