El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, recibió este miércoles al líder palestino Mahmud Abas en la Casa Blanca.

Se trata del primer encuentro entre ambos, el cual estará centrado en discutir como relanzar las conversaciones de paz con Israel.

Trump recibió a Abas frente a los jardines de la Casa Blanca, apenas dos meses y medio después de haber hecho lo mismo con el primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu.

En ese contexto, Trump se mostró optimisma tras la reunión con Abas respecto a alcanzar la paz entre Israel y Palestina: “La lograremos”, aseguró.

El portavoz de la Casa Blanca, Sean Spicer, había dicho en la víspera que el objetivo de Trump es “establecer la paz” en la región del Medio Oriente.

Este esfuerzo de largo alcance, que se ha escapado de las manos de los presidentes estadounidenses desde la década de 1970, tuvo un comienzo difícil en el gobierno de Trump.

Durante la visita de Netanyahu, Trump buscó desmarcarse del tradicional apoyo estadounidense a una solución de dos estados -uno palestino y uno israelí- y sugirió que podría trasladar la embajada de Tel Aviv a Jerusalén, rompiendo con dos principios de la política estadounidense durante décadas.

El vicepresidente Mike Pence dijo el martes que Trump seguía “considerando seriamente trasladar la embajada estadounidense de Tel Aviv a Jerusalén”.