Cerca de 1.700 trabajadores dejarían sus funciones en la división Chuquicamata de Codelco entre 2018 y 2022, como parte de la modificación que se está realizando para dejar el recinto como mina subterránea y no de tajo abierto.
A través de un documento interno enviado al Sindicato Nº5, el vicepresidente de la Federación de Trabajadores del Cobre (FTC), Daniel Díaz Olguín, comunicó que la cifra fue estimada por el gerente general, Mauricio Barraza, la que permitiría completar la transformación en curso, que implica una inversión de US$ 5.500 millones.
“Se presentó una agenda de trabajo asoladora, dado que nos indican que al año 2022 se reducirá nuestra dotación a casi el 64% (1.700 trabajadores menos), ya sea por cierre de procesos y/o ajustes de nivel de actividades”, se indica el documento, al que tuvo acceso Pulso.
Esta masiva salida de trabajadores estaría fundamentada en que una operación subterránea no necesita tantas personas como en la actualidad, además, que los sueldos son menores.
Al respecto, la presidenta del Sindicato Nº2, Liliana Ugarte, afirmó que presentarán una propuesta. “Cuando Codelco iba a cerrar la mina, hicimos una presentación a Nelson Pizarro (presidente ejecutivo de Codelco) de desarrollo de una fase más de la mina y eso es lo que le ha dado viabilidad a Chuqui hasta hoy, por lo que estamos evaluando otras alternativas”, indicó, añadiendo que no están resignados.
