Exfuncionarios de la FACH condenados por “traición a la patria” por no plegarse al Golpe Militar, pidieron a la Corte Suprema acatar el fallo internacional que ordena anular sus sentencias.

Se trata de los excompañeros del general de aviación Alberto Bachelet, padre de la presidenta y muerto por torturas en marzo de 1974, quienes recurrieron con éxito a la Corte Interamericana de Derechos Humanos (CIDHH) por sus condenas por sedición y traición a la patria.

En total es un centenar de exoficiales y suboficiales de la FACH que entre 1973 y 1975 fueron sometidos a Consejos de Guerra por no sumarse al Golpe Militar.

Doce de estos condenados demandaron al Estado chileno por “violación al derecho de protección judicial”, que significó un fallo a favor de la Corte internacional que ordena anular sus sentencias.

El proceso se inició esta semana al interior del máximo tribunal de nuestro país con un recurso de revisión que presentó el fiscal de la Corte Suprema, Juan Escobar.

El excoronel de aviación, Pedro Guerrero cree que esta vez podrán obtener justicia en nuestro país.

El excomandante, Ernesto Galaz, destacó que en el extranjero ya obtuvieron justicia.

Mario Cornejo, un suboficial degradado de la FACH, manifestó que ellos son militares de honor.

El fallo de octubre del año pasado de la CIDHH ordena además al Estado chileno indemnizar a los exuniformados con sumas que van desde 25.000 hasta 30.000 dólares a cada uno de los 12 afectados.