El director de Presupuestos del Gobierno, Sergio Granados, confirmó este jueves que el dinero que se destinará para implementar la gratuidad en educación superior en 2016, es mucho menor al anunciado previamente por el Ejecutivo.

La incertidumbre ha rodeado en los últimos meses al compromiso del Gobierno sobre gratuidad en universidades, institutos profesionales y centros de formación técnica.

Aunque en un comienzo se anunció que la gratuidad se daría a los estudiantes pertenecientes al 60% de la población más vulnerable, que asistan a instituciones superiores que sean corporaciones sin fines de lucro -es decir, la mayoría de las universidades privadas no tradicionales e institutos quedan excluidos-, ese porcentaje fue posteriormente reducido al 50%.

Además, el 21 de mayo se anunció que se invertirían 500 millones de dólares para comenzar con la gratuidad en 2016. No obstante, tras pocos meses el Mineduc bajó la cifra a 430 millones de dólares, y tras la serie de catástrofes que ha enfrentado nuestro país y el difícil momento económico a nivel mundial, existían rumores respecto a que los recursos se disminuirían incluso más.

En ese sentido, días antes de que el Gobierno enviara el Presupuesto, el diputado Pablo Lorenzini (DC), miembro de la comisión de Hacienda de la Cámara, había declarado que “la última cifra que hemos conocido es que habrá 300 millones de dólares para el inicio de la gratuidad”.

Pues este jueves, luego que el erario para el próximo año fuese enviado al Congreso, el director de Presupuestos, Sergio Granados, ratificó que los rumores eran ciertos: el dinero que se destinará a la educación superior gratuita será de 255 millones de dólares, es decir, casi la mitad de lo anunciado el 21 de mayo pasado.

Según indicó Granados, “dado que en estos 5 primeros deciles, hay estudiantes que tienen becas y distintos programas de ayuda, el costo incremental de esta política son 177 mil millones de pesos”.

En total, serían alrededor de 200 mil los alumnos de educación superior que serán beneficiados con el no pago del arancel el próximo año.