Preocupados y en estado de alerta están los conductores de radiotaxis y locomoción colectiva menor de la ciudad de Coquimbo, debido a los frecuentes asaltos de los que son víctimas y al peligro que significa para sus vidas prestar este servicio a la comunidad.

La frase “¿volante o maleta?” ya es común para los taxistas, quienes declaran estar atados de manos ante el actuar de los delincuentes, que a juicio de ellos, están fuera de control.

La zona centro de la ciudad puerto es considerada de alto riesgo por los choferes, lo que se agrava al oscurecer, cuando la delincuencia aflora, y más aún en horas de la madrugada.

Desde aquí los móviles salen hacia diversos puntos, pero como denominador común, el sector donde se concentran los robos a mano armada contra los conductores es en la Parte Alta coquimbana.

Atados de manos

De lo último señalado, bien sabe Mauricio García, quien se desempeña como conductor de la empresa Radiotaxis Coquimbo hace ya 5 años, y fue víctima de los antisociales días atrás. Diario El Día lo entrevistó para conocer de primera fuente el problema delictivo que le afectó a él y a varios de sus compañeros de labores.

“Dos personas me pidieron un traslado hasta calle Portales con Arturo Godoy en la Parte Alta, y en instantes que llegamos al lugar, uno de ellos puso un cuchillo en mi cuello, mientras que el otro sacó las llaves del móvil. Después procedieron a quitarme el dinero y teléfonos, instante en el cual me zafé y arranqué, ya que pensaban meterme al maletero del auto”, relató el afectado conductor.

García también se refirió al peligro que significa trabajar de noche y más cuando ocurren asaltos. “Al suceder estos hechos pierdes la confianza, trabajas asustado y no puedes estar tranquilo. Como conductor, creo que la única manera de abordar esto es organizarse debidamente e implementar sistemas de rastreo y reacción. Nuestros compañeros y los conductores de otras líneas también han sufrido robos, y muchos están optando por portar algún elemento para su defensa”, detalló a diario El Día.

Quien también sufrió del actuar delictual, fue el conductor de taxis, Herman Riffo, quien en instantes que trasladaba a dos pasajeros hacia el sector alto de la ciudad de Coquimbo, fue encañonado con una escopeta hechiza en su cabeza y le quitaron el dinero, obligándolo a bajar del móvil, el que finalmente fue encontrado abandonado.

“Estos hechos nos tienen en la total indefensión, ya que no tenemos como reaccionar. Claramente el vernos afectados y atados de manos por los delincuentes nos da impotencia, ya que por un lado nos quitan nuestro sustento, pero también atentan contra nuestra seguridad e integridad”, señaló el conductor de la locomoción colectiva.

Gremios y directivas

La problemática delincuencial es transversal entre la locomoción pública menor y las empresas de radiotaxis, por lo cual, diario El Día concurrió a conversar con sus representantes.

Al dialogar, se hace evidente el malestar existente entre los conductores y propietarios de vehículos, quienes por un lado, ven como surge la necesidad de destinar recursos a mejorar los sistemas de seguridad de los móviles, pero también, con impotencia asimilan que muchos de sus empleados optan por abandonar las labores de conducción, ante el peligro al cual están expuestos.

Mientras los conductores afectados por ilícitos realizaban demostraciones de los atracos, para graficar los hechos de los cuales son víctimas, Ricardo Arancibia, representante legal de la empresa radiotaxis Coquimbo, informó a diario El Día que “en la última semana nuestros trabajadores fueron víctimas de constantes asaltos. Los delincuentes toman los vehículos en la terminal de buses, quienes en general poseen buena apariencia, y requirieren un servicio hacia la Parte Alta de la ciudad, al llegar a destino el tipo se baja y aparecen otras personas que concretan el robo usando pistolas. Esto es terrible”, aseguró.

También se refirió a las acciones que como empresa deben tomar ante el actuar de los antisociales, y precisó que mediante la central que trabaja las 24 horas, se está pendiente del lugar en el que se encuentran los móviles. Sin embargo, esto es insuficiente, e indicó que con los últimos hechos, se ven obligados a generar un protocolo de acción para poder actuar ante los ilícitos, y a dotar de sistemas GPS para rastrear los vehículos.

“Es muy complejo reaccionar, ya que nuestros choferes pueden sufrir heridas de gravedad por defenderse. Muchos de ellos están presentando problemas de salud, por haber estado sometidos al stress que genera un asalto, lo que hace perder la confianza para trabajar”, concluyó el representante legal de radiotaxis Coquimbo.

Al problema ya expuesto, se agrega el mal estado de las luminarias en ciertos sectores de la ciudad y comuna, lo cual contribuye a los ilícitos, sumado también a la carencia de zonas seguras para “tomar” pasajeros. Estos elementos frecuentemente afectan a la locomoción pública, que no posee un punto fijo de partida, como sí los radiotaxis.
Para obtener información certera y precisa sobre lo último mencionado y la visión de los gremios de líneas de taxis colectivos, se analizó la situación con Héctor Briceño, presidente de la Agrupación de Taxis Colectivos, IV Región Coquimbo, quien puso hincapié en la necesidad de reactivar una mesa de trabajo con las autoridades de Gobierno y de seguridad, para abordar la problemática delincuencial y de inseguridad que afecta al gremio.

“Estamos entregando un servicio que abarca al 70% de la comunidad, pero lamentablemente existen muchas complicaciones para dar solución a la problemática de los asaltos que afectan a los conductores de nuestros gremios, donde se evidencia que se está perdiendo todo control sobre los delincuentes. Los asaltos no solo son por dinero, sino que además dañan a la persona físicamente con armas blancas”, manifestó a diario El Día, Héctor Briceño.

Además, el presidente de la Agrupación de Taxis Colectivos, IV Región Coquimbo, enfatizó que “existen muchos sectores en la comuna con mala iluminación, donde también faltan lugares aptos para dejar y tomar pasajeros. Estos son factores que hoy nos ponen en un peligro al cumplir nuestro trabajo y propician la delincuencia, principalmente en los sectores de Parte Alta, Las Torres y Tierras Blancas”, finalizó el dirigente gremial.

Compromiso para abordar la problemática

Según los conductores y los representantes de los gremios del trasporte menor, la solución al problema delictual que les aqueja, radica en lograr normativas para disuadir a los antisociales, para lo cual, señalan, es necesario el compromiso de autoridades y la voluntad política, además de un trabajo conjunto con Carabineros.

Ante el emplazamiento, diario El Día consultó al seremi de Transportes y Telecomunicaciones, Óscar Pereira, quien mostró disposición a trabajar con los gremios para lograr acciones tendientes a enfrentar la victimización en los conductores de taxis colectivos y radiotaxis.

“Estamos dispuestos a trabajar con Seguridad Pública, Carabineros, municipio y los conductores afectados por los ilícitos, para buscar la mejor manera de enfrentar la delincuencia y darles mejor condiciones de trabajo”, señaló Pereira.

No obstante, el seremi de Transportes, también detalló que se deben mejorar los sectores que no poseen una buena iluminación, al igual que los trazados, para dar mayor seguridad tanto a los usuarios del sistema, como a los transportistas. Igualmente, señaló que “es necesario dotar de un sistema de GPS y radios a los móviles. En ese caso, estamos apoyando la renovación de taxis colectivos, y las empresas podrían acceder a recursos del Gobierno Regional para implementar estas mejoras de seguridad”, consignó a diario El Día, Óscar Pereira.

Por su parte, desde Carabineros de Coquimbo, realizaron un llamado a los conductores y representantes de los gremios del trasporte mayor y menor, a realizar las denuncias pertinentes cuando sean víctimas de los atracos, ya que estos antecedentes son vitales para georreferenciar los servicios preventivos, y dar una eficaz solución al problema de inseguridad. A su vez, informaron sobre la disposición de la institución para conformar una mesa de trabajo.

“Hay una baja del 33% en delitos que afectan a conductores de locomoción pública, lo cual no excluye la existencia de ilícitos que no son denunciados, haciendo aparecer una cifra negra o marginal. Para nosotros es vital contar con la información para implementar servicios, y eso es un compromiso”, aseguró el Comisario de Carabineros de Coquimbo, Gianni Barnato.

Además, la autoridad policial, manifestó que “estamos dispuestos a trabajar junto a los gremios de la locomoción colectiva para efectuar acciones en conjunto, y poder mejorar sus condiciones laborales, ya que el servicio que prestan facilita la comisión de ilícitos y el robo de vehículos. No obstante las empresas deben implementar medidas de seguridad”, concluyó Barnato.