La madre de un interno de la cárcel Bío Bío de Concepción, denunció que su hijo recibió una golpiza de manera injustificada por parte de los gendarmes a raíz de un allanamiento sorpresivo a su celda. La mujer sospecha que se trata de una venganza por los reclamos que el reo ha realizado sobre el maltrato que se vive en el penal.
La denuncia fue presentada ante Gendarmería y la Fiscalía local de Concepción por Janet Figueroa, en favor de su hijo, Víctor Eduardo Cid Figueroa, de 31 años, recluído en el módulo 46 del centro penitenciario Bío Bío, donde cumple condena de 15 años, de la cual le restan dos años y siete meses.
Ella y su marido lo visitaron el 31 de diciembre recién pasado, en vísperas de Año Nuevo, y se retiraron sin sospechar nada hasta que horas después, otro recluso, a través de una llamada emitida desde dentro del penal, les avisó que su hijo se encontraba en la celda de castigo.
De acuerdo a una declaración escrita del interno, tras las visitas se verificó un allanamiento, momento en que un gendarme le solicitó situarse contra la pared, pero él pidió colocarse el calzado primero, generándose la discusión que lo dejó esposado de pies y manos, y, según la madre, brutalmente castigado y aislado.
Según Janet, su hijo pasó un día en la celda de castigo, esposado, sin frazada o colchón, y todo porque hace algunos meses, reclamó precisamente por maltratos ante un ministro de la Corte de Apelaciones de Concepción, en medio de las llamadas visitas semestrales.
David Romo, vocero de los reclusos de El Manzano, respaldó la tesis de una venganza.
Janet acompañó la denuncia con fotografías en las que se aprecian hematomas en la espalda de su hijo, causados con un elemento contundente. Agregó que Víctor, además, se autoinfirió una herida cortante en un brazo para llamar la atención del maltrato, por el cual Gendarmería ni nadie se hace responsable.
Pedro Cid (RBB)
Pedro Cid (RBB)
