Un kamikaze mató el miércoles a por lo menos 26 combatientes que luchan contra el grupo Estado Islámico (EI) al hacerse estallar al sur de Bagdad, informaron las autoridades.

El ataque, que también causó 56 heridos, se produjo cerca de una base militar en la zona de Madaen, al sur de Bagdad, donde miembros de las milicias antiyihadistas Sahwa se habían congregado para cobrar sus salarios.

El atentado no ha sido reivindicado pero este tipo de acciones suele ser obra de yihadistas sunitas, principalmente del grupo EI.

Los yihadistas del EI lanzaron una ofensiva en junio que les permitió apoderarse de regiones sunitas de Irak. Las fuerzas gubernamentales, con predominancia de chiitas, intentan reconquistarlas con la ayuda de combatientes sunitas y de kurdos y el apoyo de ataques de la coalición.

Reclutadas entre las tribus locales, las Sahwa son milicias sunitas creadas en 2006 por el ejército estadounidense para luchar contra Al Qaida. Ayudaron a reducir la violencia de forma significativa y actualmente combaten al EI.