Un dron estadounidense destruyó el martes en el norte de Irak un mortero utilizado por los yihadistas sunitas contra las fuerzas kurdas, informó el Centcom, el comando militar norteamericano que cubre Medio Oriente y Asia central.

Según el comando, a las 11:55 horas GMT el dron “alcanzó y destruyó un mortero del Estado Islámico (EI) dirigido contra las fuerzas kurdas que protegían a civiles yazidíes en fuga”.

Este ataque aéreo se realizó en el marco de las operaciones autorizadas el jueves por el presidente estadounidense, Barack Obama, con el argumento de que son para proteger al personal diplomático de su país en Erbil, la capital del Kurdistán iraquí, y a los refugiados cristianos y yazidíes.

Los yazidíes, una minoría kurdohablante, fueron desplazados de sus hogares la semana pasada cuando los insurgentes ocuparon la ciudad de Sinjar, en el norte del país. Atrapados en las áridas montañas de sus alrededores, miles de yazidíes tratan de sobrevivir al hambre y a los yihadistas.

El reciente envío de aviones y drones estadounidenses a Irak, tres años después de la retirada de las tropas del país, ha despertado el temor de que Washington se vea arrastrado de nuevo a una guerra.