Con un dudoso permiso de instalación y en un terreno de uso de suelo agrícola, funciona actualmente la planta de cal Sibelco, en el sector Curimón de la comuna de San Felipe. La empresa incluso, recibe material de Argentina para repartirlo a otros sectores.

Se trata de una industria que preocupa a los vecinos, pues se ubica a pocos metros de un colegio, rodeada de parronales y a escasos 300 metros del río Aconcagua.

Una situación que para el presidente de la Comisión de Medio Ambiente del Consejo Regional, Mario Sottolichio, representa todo un riesgo, por lo altamente contaminante que es la cal.

Además de ello, el consejero advirtió una serie de anomalías en el proceso de aprobación de la planta.

Sottolichio planteó la problemática a la Seremi de Medio Ambiente, donde entregaron toda su disposición a revisar todo el proceso de instalación, para así determinar las eventuales anomalías y sus respectivas responsabilidades.

El consejero regional explicó que la Seremi iniciará una revisión e investigación en la que solicitará antecedentes a la Superintendencia de Medio Ambiente sobre la aprobación de la planta. Con esa carpeta, junto a los vecinos de Curimón y la comisión del CORE, esperan solicitar la intervención de Contraloría y eventualmente, detener el funcionamiento de esta empresa.