El desempleo en España registró una baja histórica en abril, del 2,33% respecto a marzo, anunció este martes el gobierno, pero en un país con aún cinco millones de desocupados la mejora sigue siendo insuficiente, reconoció el jefe del ejecutivo, Mariano Rajoy.

“El paro registrado en el mes de abril ha disminuido en 111.565 personas respecto al mes anterior y el número total de parados registrados en las Oficinas de los Servicios Públicos de Empleo se sitúa en 4.684.301″, informó el ministerio de Empleo en un comunicado.

“Se trata del mejor comportamiento del paro registrado en un mes de abril en toda la serie histórica” comparable, iniciada en 2001, subrayó.

Descontando el efecto estacional, en un momento en que comienzan las contrataciones de la temporada turística estival, el desempleo se redujo en 50.202 personas ese mes, frente a un incremento promedio de cerca de 37.000 personas desde que estalló la crisis en 2008, precisó el gobierno.

En los últimos 12 meses, el número de desempleados disminuyó en 304.892 personas, según el ministerio.

Son “buenos datos”, reaccionó inmediatamente Rajoy, en una entrevista a la radio privada Cadena Ser. “Estoy esperanzado de cara al futuro porque creo que hemos roto una tendencia de destrucción de empleo y ya estamos en la tendencia contraria”, afirmó, aunque reconociendo que por el momento “esto es absolutamente insuficiente”.

“Mientras haya más de cinco millones de personas en el paro en España, esto no se puede aceptar y por lo tanto no estoy satisfecho”, agregó, pese a considerar que España ha superado “lo peor” de la crisis.

Según los diferentes métodos oficiales de cálculo, el país tiene entre 4,7 millones y 5,9 millones de demandantes de empleo, con una tasa de desocupación de 25,93% en el primer trimestre de este año.

Desalentados en su búsqueda de empleo, muchos desocupados abandonaron su empeño o decidieron irse de España, entre ellos numerosos inmigrantes que regresaron a sus países.

LA CRISIS SIGUE “AHÍ”

Desde Bruselas, también el ministro español de Economía, Luis de Guindos, consideró que “mientras la tasa de paro en España esté donde esté, la crisis está ahí”. “Es el problema fundamental de España”, subrayó.

Las incipientes muestras de reactivación económica en la cuarta economía de la Eurozona, con un crecimiento del 0,4% del PIB en el primer trimestre, tras las alzas de 0,2% y 0,1% respectivamente en el cuarto y tercero de 2013, despertaron el optimismo del gobierno y de Bruselas.

“El año que viene la Comisión Europea, en las previsiones que hizo ayer, dice que España va a crecer más que Francia, que Italia, que Alemania”, recordó Rajoy.

En la presentación de sus previsiones de primavera, la Comisión avanzó el lunes un crecimiento del 2,1% del PIB español en 2015, frente a 1,5% para Francia, 1,2% para Italia y 2% para Alemania.

Rajoy recordó que hace dos años la salud de la economía española suscitaba serias inquietudes, con un país al borde de la quiebra. “Logramos evitar el rescate y créanme que no fue ciertamente fácil, pero por lo menos no nos pasó lo que desgraciadamente le ocurrió a otros países” como Grecia o Portugal, afirmó.

Ahora “en su conjunto la economía española está bastante mejor” pero “debemos perseverar”, reconoció el líder conservador, admitiendo que “no todo va bien”.

Esta ligera mejora del crecimiento no se traducirá hasta dentro de unos años en el frente laboral: el ejecutivo español prevé una tasa de desempleo de 24,9% en 2014 y de 23,3% en 2015 y Bruselas de 25,5% y 24% respectivamente.

Por su parte, la oposición socialista acusó al gobierno de “utilizar de forma electoralista y de forma irresponsable” los datos de desempleo, “lanzando un optimismo que no se corresponde en nada con la realidad” social de los españoles, en palabras de su portavoz en el Congreso, Soraya Rodríguez.