El alemán Sebastian Vettel envió “mucha fuerza” a la familia de su compatriota Michael Schumacher y confesó que sufrió un fuerte golpe emocional al enterarse del accidente de esquí que dejó en coma al heptacampeón de Fórmula 1.

“Cuando me enteré quedé profundamente afectado”, explicó Vettel a la revista “Sport Bild” comentando por primera vez en detalle la situación de Schumacher.

“Por supuesto que en ese momento a uno le pasan recuerdos por la cabeza”, añadió el actual campeón de Fórmula 1. Vettel recordó por ejemplo el día de 1994 en que se encontró por primera vez con Schumacher, su ídolo desde la infancia.

Schumacher venía de ganar su primer mundial y Vettel, aún adolescente, acaba de conquistar el campeonato alemán. “Y ocurrió lo previsible. Cuando lo tuve enfrente, no supe qué decirle”, contó el piloto de 26 años.

Vettel creció admirando los logros de Schumacher hasta comenzar a escribir su propia historia en la Fórmula 1, en la que lleva cuatro mundiales consecutivos con Red Bull. Ambos son ahora amigos y Vettel recibe cada tanto algún consejo del mítico heptacampeón.

“Espero que se recupere lo antes posible”, confió Vettel. Schumacher, de 45 años, se encuentra en un estado “estable” pero “crítico” después de golpearse la cabeza contra una piedra el 29 de diciembre cuando esquiaba en la estación francesa de Méribel.