La emergencia sanitaria ocurrida en junio del año pasado en el vertedero Copiulemu y que afectó a vecinos del sector Chaimávida, fue la detonante del proceso de sanción iniciado por la Superintendencia de Medio Ambiente contra la empresa, a la que formalizó cargos por una serie de incumplimientos ambientales.

Desde el momento de su notificación, el relleno sanitario e industrial tiene 10 días de plazo para presentar un programa de cumplimiento ambiental y 15 días para formular descargos a la autoridad fiscalizadora.

Aunque desde hace años los vecinos de la población Chaimávida han denunciado ser afectados por el funcionamiento del centro de residuos, fue el desmoronamiento de una ladera del cerro el 28 de junio de 2013 lo que originó el procedimiento administrativo.

Esto, porque el arrastre de tierra rompió un ducto, generando el vertimiento de cerca de 1.000 metros cúbicos de riles sin tratar hacia el estero Las Puyas, de donde se abastecen los residentes de sectores aledaños.

El senador integrante de la comisión de medio ambiente, Alejandro Navarro, asegura que las falencias del vertedero Copiulemu han quedado a la vista.

Tras una investigación de seis meses, se formularon cuatro cargos a Hidronor Copiulemu, clasificados algunos de leves y otros como incumplimientos graves de las medidas para minimizar los efectos adversos de un proyecto.

Se detalla que una parte de la segunda etapa del relleno sanitario no tiene cobertura diaria y la basura queda expuesta, siendo arrastrada por el viento. También da cuenta de deficiencias en el laboratorio y de una capacidad de tratamiento de riles inferior a lo establecido en el permiso ambiental de 2009.

Este proceso de sanción es el cuarto iniciado por la Superintendencia de Medio Ambiente en la región del Bío Bío. Antes, este nuevo organismo de la institucionalidad ambiental formuló cargos a la refinería ENAP de Hualpén, a la central Bocamina II de Endesa, y también en Coronel a la termoeléctrica Santa María de Colbún.

Declaración Pública de Hidronor

En relación al expediente de la Superintendencia del Medio Ambiente, la empresa Hidronor Copiulemu señala que:

-Las sugerencias planteadas en dicho expediente surgen luego de la fiscalización llevada a cabo por la SMA tras el accidente ocurrido en junio de 2013 en la planta de Copiulemu.

-Todas las recomendaciones sugeridas por la SMA fueron acogidas e implementadas por la empresa durante los últimos meses en un proceso participativo y consensuado con las autoridades pertinentes.

-Una de las acciones más determinantes fue el muestreo de aguas tomado en distintos puntos de los esteros las Puyas, Las Casas y Chaimávida, cuyo resultado indicó que todas las aguas analizadas cumplen con los criterios establecidos en la norma chilena 409 de agua potable y la norma 1.333, que establece los requisitos de calidad del vital elemento para diversos usos, entre ellos en los rubros agrícola y ganadero.

-La toma de muestra fue realizada por el Laboratorio Biotecmar de la UCSC, el cual fue escogido por los propios vecinos de Copiulemu con el fin de brindar total transparencia a este proceso.

-Otro de los compromisos que emanó de la mesa de trabajo, conformada por vecinos, autoridades y empresa, fue la mejora tecnológica de las instalaciones por parte de Hidronor, a fin de mitigar el impacto ambiental en las comunidades vecinas, principalmente respecto a los olores. Estas mejoras se han llevado a cabo y han sido socializadas con los vecinos en visitas a la planta, como ocurrió en el mes diciembre, cuando un grupo de dirigentes recorrió las instalaciones junto a la seremi de Medio Ambiente y la directora de Medio Ambiente del municipio de Concepción.

Finalmente, la empresa Hidronor Copiulemu S. A quiere enfatizar que la comunidad puede estar tranquila porque esta empresa cumple con todas disposiciones normativas que regulan nuestra actividad.