Este martes entró en vigencia la nueva Ley de Donación Universal, la cual determina que todos los chilenos son donantes de órganos, a menos que expresen lo contrario por medio de un documento firmado ante notario.

Este trámite se puede realizar de dos formas, según instruyó la Corte Suprema el lunes: por medio de una escritura pública o por un documento privado, el cual deberá ser autorizado y protocolizado por los notarios.

El problema es que esto no es gratis: según informó la Asociación de Notarios y Conservadores de Chile, el precio promedio de la escritura pública podría ser de 8 mil pesos, mientras el documento protocolizado costaría alrededor de 5 mil pesos.

No obstante, este precio varía dependiendo del local. Algunas notarías consultadas por BioBioChile indicaron que una escritura pública incluso superaría los 15 mil pesos, pero esto aún no se puede afirmar con seguridad, ya que la Corte Suprema realizará una nueva reunión este miércoles para evaluar ampliar las instrucciones a los notarios.

Respecto a por qué las autoridades decidieron que la gente tuviese que seguir este procedimiento legal para ingresar al Registro de No Donantes, el ministro de Salud, Jaime Mañalich, indicó este domingo que “nuestra esperanza es que al transformar la manifestación de voluntad de no donar en una cosa mucho más formal (…) es que en el futuro veamos progresivamente que menos y menos personas quedan inscritas en este Registro de No Donantes, y es ése el esfuerzo importante que queremos hacer a través de esta ley”.

Si bien algunas personas se han expresado a favor de este nuevo sistema, otros se han manifestado contra el alto costo que tiene este documento y el negocio que esto puede significar para las notarías. A continuación, te invitamos a expresar tu opinión sobre este tema: