Nuevamente familiares y pacientes del machi Pascual Catrilaf Curiche exigieron su libertad. Recordemos que el mapuche cumple una sentencia de 301 días de presidio en la región de La Araucanía.

El machi fue condenado por el delito de lesiones menos graves, luego que en el 2011 el Ministerio Público lo acusara de agredir a una joven de 19 años.

Actualmente se mantiene recluido en la cárcel de Nueva Imperial, donde mantendría una huelga de hambre desde el 12 de marzo.

Un grupo de familiares y pacientes del machi se reunieron en Temuco, asegurando que las pruebas presentadas en el juicio fueron falsas.

Además, plantearon que el condenado debería tener un trato especial por ser una autoridad ancestral. Así lo señaló Elieser Catrilaf Curiche, dirigente del sector Entre Ríos.

Según se indicó, la justicia debería respetar el Convenio 169 de la OIT, el que entre sus artículos señala que “deberá darse la preferencia a tipos de sanción distintos al encarcelamiento” cuando se trata de personas de pueblos originarios, y especialmente a las autoridades religiosas.