Un abogado de la Unión Ciclista Internacional (UCI) pidió una sentencia “ejemplar” al médico Eufemiano Fuentes, principal acusado en una amplia red de dopaje y que este miércoles se dijo dispuesto a entregar la lista de sus clientes a las autoridades antidopaje.

En representación de la UCI, Pablo Jiménez de Parga, pidió una sentencia “ejemplar” para Fuentes en el que considera “el juicio contra el mayor entramado de dopaje posiblemente en todo el mundo”, un proceso que se está celebrando en Madrid.

El abogado reiteró que si son declarados culpables, las penas indicarán el grado de compromiso de las autoridades españolas en la erradicación del dopaje.

“Ha llegado el momento de que todo el mundo sepa cuál es la respuesta que da España a este tipo de conductas. Así se analizará la sentencia fuera de nuestro país, y no entenderlo así es cerrar los ojos a la realidad”, explicó en su informe final.

Fuentes y los otros cuatro acusados en el juicio de la Operación Puerto (los exdirectores ciclistas Vicente Belda, Manolo Saiz, la hermana de Fuentes y también médico Yolanda Fuentes, y el preparador físico Ignacio Labarta), se enfrentan a un delito contra la salud pública por la realización de transfusiones de sangre a un gran número de ciclistas.

La fiscal pidió el pasado viernes dos años de prisión contra el principal acusado, Fuentes, del que dijo que era el director de una red “fraudulenta y punible”.

“Estamos ante un programa sistemático de dopaje que no solo incluía las transfusiones, sino también la administración de sustancias prohibidas”, insistió el abogado de la UCI.

Además, Jiménez de Parga señaló que seis ciclistas españoles (Ángel Vicioso, Isidro Nozal, Joseba Beloki, Unai Osa, David Etxebarria y Marcos Serrano) podrían ser acusados de perjurio porque en sus testimonios “negaban claras evidencias”.

Estos testimonios también fueron criticados por los abogados del Comité Olímpico Italiano (CONI) por preconcebidos e incompletos.

Fuentes, por su parte, se mostró dispuesto este miércoles a dar la lista de sus clientes a la Agencia Mundial Antidopaje (AMA) y a la Agencia Española Antidopaje (AEA) si se lo piden.

“Si ellos consideran que soy útil y me lo piden, lo consideraría y estaría dispuesto (a colaborar). Lo que no sé es si lo que yo voy a aportar les vale o no les vale”, declaró Fuentes al finalizar la audiencia.

“Si dentro de esa colaboración esa lista fuera necesaria, la tendrían”, reiteró.

El médico canario, que dice que conserva una libreta en la que figuran todas las correspondencias entre los nombres de sus antiguos clientes y los códigos que figuran en las bolsas de sangre encontradas por la policía en su casa en 2006, ya propuso su colaboración a la jueza del caso al inicio del proceso.

Sin embargo, la magistrada le desestimó a considerar que este aspecto no formaba parte del caso propiamente dicho.

Al finalizar la audiencia, Fuentes volvió este miércoles a proclamar su inocencia: “Todo lo que he hecho lo he hecho ajustándome a los procedimientos y a la legalidad vigente. En 35 años no he producido ningún daño a ningún paciente. Arrepentirme de haber realizado mi labor profesional lo mejor posible no tendría sentido”.