Molestia es lo que expresaron los dueños de predios en la zona roja del conflicto mapuche ante el presidente de la República, Sebastián Piñera, quien llegó hasta el fundo Lumahue para reunirse con los hijos de Werner Luchsinger y su esposa Vivianne Mackay, fallecidos fallecidos tras un atentado incendiario.

Varios de los agricultores interpelaron al mandatario y consideraron que los anuncios realizados en su visita no fueron suficientes.

María Isabel Fourcade, propietaria del fundo Santa Isabel en Lautaro, afirmó que existe dolor entre los agricultores tras este nuevo atentado, pidiendo al presidente Piñera que los proteja.

Junto a ello, llamó a los chilenos que tengan “corazón, agallas y cojones” a defender la zona.

Mientras Piñera se encontraba en el lugar, varios agricultores salieron repentinamente del lugar luego que se diera el aviso que desconocidos ingresaban al fundo de la familia Puig.