Siete personas estaban desaparecidas y al menos dos heridas tras el derrumbe de un túnel de autopista la mañana del domingo a unos 80 km al oeste de la capital por razones aún desconocidas, indicaron los servicios de emergencia.

Las operaciones para socorrer a los automovilistas atrapados fueron interrumpidas a media jornada por los riesgos de un nuevo desplome de la obra fragilizada, según la agencia Jiji.

“Según los servicios locales de lucha contra el fuego, siete personas faltaban pero la cifra no fue confirmada” por las autoridades centrales, indicó a la AFP un responsable de la seguridad civil.

Al menos dos mujeres resultaron heridas y estaban hospitalizadas, en el accidente ocurrido a las 08H00 (23H00 GMT del sábado) cuando una parte de la bóveda del túnel de Sasago, uno de los más largos de Japón (4,3 km) se vino abajo a lo largo de unos 50 metros.

Las mujeres heridas “estaban conscientes” cuando fueron atendidas por los socorristas antes de su traslado al hospital, según un responsable de los bomberos de la prefectura de Yamanashi.

“Una de ellas, de 28 años, tiene heridas en la cabeza, rostro y manos. La otra, de 37 años, sufre contusiones”, explicó a la AFP.

“Un camionero pidió ayuda a un colega desde el interior del túnel. Parecía atrapado en su vehículos. Una ambulancia va de camino”, añadió.

Dos vehículos fueron aplastados por bloques de cemento, un tercero ardió, añadió, y precisó que el fuego fue dominado a las 11H00 (02H00 GMT).

Según un responsable de los bomberos en el lugar, la sección del túnel que se derrumbó se encuentra casi en el centro de la obra.

Un periodista de la televisión pública NHK contó que iba al volante dentro del túnel en dirección a Tokio cuando se vino abajo.

“Logré salir del túnel pero varios vehículos no muy lejos de mí quedaron atrapados dentro. Pude ver humo negro y llamas”, contó.

NHK difundió imágenes tomadas en el túnel y se podía ver una ambulancia y socorristas en medio de un humo espeso del que emergían las luces de los vehículos atrapados.

“El sistema de ventilación del túnel no funciona bien, no se ve nada a más de un metro”, indicó por teléfono a la AFP Kazuya Tezuka.

En el exterior, camiones de bomberos estaban apostados a la salida del túnel del lado de Tokio. También se podían ver decenas de personas a pie que esperaban en los arcenes.

Una joven de 28 años que consiguió escapar declaró que estaba sin noticias de otras cinco personas a bordo del minibús en el que circulaba.

Un hombre de unos 30 años contó que circulaba por el lugar donde se produjo el derrumbe del túnel: “una sección del techo de cemento se cayó en el momento en que estaba pasando. Vi salir lamas de un automóvil aplastado. Estaba aterrado. Salí del coche y caminé una hora para llegar al exterior”, dijo a NHK.

El túnel, que atraviesa relieves no lejos del monte Fuji, se encuentra en la autopista muy frecuentada de Chuo que comunica a Tokio con el oeste y el centro del país.