La megatormenta Sandy causó serios problemas al recinto del Consejo de Seguridad de Naciones Unidas, obligándolo a mudarse a una sede temporaria para mantener una reunión especial este miércoles, dijeron diplomáticos.

El Consejo, integrado por 15 países, llamó apresuradamente a un encuentro para aprobar una resolución de emergencia que extienda por siete días más el mandato de la Misión de la Unión Africana en Somalia (AMISOM) para el mantenimiento de la paz en ese país.

La reunión debió haberse realizado a principios de la semana, porque el mandato finaliza este miércoles. Sin embargo, fue suspendida por el huracán devenido en megatormenta que azotó Nueva York el lunes de noche.

La sala del Consejo de Seguridad se encuentra en el sótano de la sede de la ONU con vistas al East River, que se desbordó durante la tormenta.

Hay “algunos daños causados por el agua en el sótano”, dijo un portavoz de la ONU, Farhan Haq, pero el organismo no brindó más detalles y a los periodistas no se les permitió la entrada a la sede este miércoles.

Diplomáticos, que prefirieron mantener el anonimato, dijeron que el daño a las plantas subterráneas se entiende que es “bastante serio”.

La sede de la ONU estuvo cerrada desde la tormenta.

La resolución sobre la fuerza de mantenimiento de la paz en Somalia señaló “las circunstancias excepcionales en la ciudad de Nueva York derivadas del huracán Sandy” como la razón para una extensión de solo una semana de la misión.

Sin la resolución, AMISOM, que está jugando un rol clave para apuntalar al inicipiente gobierno de Somalia, técnicamente se hubiera vuelto ilegal desde el jueves.