Dirigentes socialistas ligados a la candidatura de Jaime Soto en San Pedro de la Paz, afirmaron que su contendor en las municipales tramitó un cambio en el decreto de demolición de un edificio colapsado, dejándolo sólo en reparación. Esto, a cambio de un departamento que le fuera vendido a “precio de huevo”.

En guerra electoral declarada, Retamal y la inmobiliaria respondieron desestimando cualquier irregularidad y afirmando que el decreto lo cambió el Gobierno y no el municipio.

La acusación, documentos en mano, provino del consejero regional socialista Eduardo Araya, y el concejal por San Pedro de la Paz, Felipe Vásquez, ambos ligados a la candidatura a alcalde de Jaime Soto.

Se trata del colapso de la torre de un edificio de 15 pisos, la más alta de Huertos Familiares, que registró daños post terremoto y obtuvo decreto de demolición, sin embargo, éste cambió posteriormente a reparación.

Entre tanto, la empresa inmobiliaria en cuestión, Paumar S.A., cobró el seguro por pérdida total y vendió al acalde un departamento en otro edificio -según los denunciantes- por unos 30 millones de pesos menos del valor comercial.

Araya sospecha derechamente el pago de un favor político:

Vásquez pidió explicaciones para despejar dudas:

Audito Retamal se defendió de los cargos y explicó que resultó damnificado por las fallas de ese edificio y la inmobiliaria donde compró un departamento. Dijo que como a cualquiera de sus clientes, se le ofreció otro edificio para acceder a la propiedad, pero en ningún caso en la liquidación que sus detractores aseguran.

Por su parte, la inmobiliaria en comunicado de prensa recalcó que el decreto de demolición de Alto Huerto se modificó debido a estudios externos encargados por el Ministerio de Obras Públicas. Unos análisis “absolutamente concluyentes”, según la inmobiliaria Paumar, respecto de la condición de recuperable del edificio y nada tendría que ver con una decisión arbitraria desde el municipio.