Activistas pidieron este martes a las democracias occidentales que hablen alto y claro para solicitar la liberación de Liu Xiaobo, temiendo que la presión en Pekín se haya relajado dos años después de que el disidente chino ganara el premio Nobel de la Paz.

Decenas de activistas se manifestaron en las proximidades de la Casa Blanca portando la foto de Liu y protagonizando una simbólica comida en su honor, en la que no se sirvió ningún alimento o vino como una forma para remarcar la ausencia del disidente y su mujer, Liu Xia, que se encuentra en arresto domiciliario.

Han Lianchao, vicepresidente de la organización con sede en Washington Initiatives for China, dijo que el grupo organizó el evento con la esperanza de recibir atención para el único premio Nobel del mundo detenido.

“No creo que las democracias occidentales hayan hecho lo suficiente para liberarlos. Creo que la gente tiende a olvidar rápidamente”, dijo Han.

El grupo organizó un evento similar en Budapest y envió cartas a los embajadores de naciones democráticas con sede en Pekín, instando a que hablaran claro en nombre de Liu y su mujer.

China respondió de manera furiosa a la concesión del premio Nobel de la Paz a Liu hace dos años y tomó represalias frente a Noruega.

El presidente Obama y otros líderes mundiales pidieron a China que liberara a Liu y otros prisioneros, aunque ahora los grupos que apoyan esta causa temen que el foco de atención se haya apagado debido al tiempo que ha pasado desde la concesión del Nobel.