Uno de estos días sin querer me quedé viendo en la televisión, un programa de concursos de belleza infantil. No les miento, sentí dolor de estómago al ver cómo puede deformarse una sociedad de esa manera.
Me quedé pensando en esas pequeñas niñitas y en el futuro que les deparará, pensé también como madre: ¿Quién soy yo para decidir el futuro de mis hijos? Y menos pensar en qué carrera seguirán cuando sean grandes. Lo que digo puede sonar obvio, pero bueno lectores, no lo es.
Hay madres que ya a los 2 años comienzan a preparar la carrera de sus hijas, sueñan con que sean modelos y desde niñas las entrenan.
Quiero hablar de este tema que a los psicólogos infantiles nos eriza la piel, es importante que los chilenos sepamos de qué se trata este mundo falso de luces que puede destruir la vida de nuestros hijos. Hace un tiempo me enteré que este tipo de concursos estaba llegando a países latinos y que ya existen certámenes chilenos intentando copiar el pésimo modelo que nos da Estados Unidos en este ámbito.
Se tienen registros incluso de bebés de 8 meses que han ingresado a concursos de belleza, pero los más comunes son entre los 2 y los 8 años. Éstos se dividen en categorías por edades donde reciben premios en dinero que son entregados a sus padres.
Lo que tienen que hacer las niñas en estos concursos es disfrazarse de adultas, jugar a ser princesas, intentar ser modelos y además seducir a un jurado para ser elegida como reina, las madres caminan ansiosas, mientras ofrecen premios a la niña si se aprende bien su rutina y castigos si no cumplen con lo que ensayaron previamente.
Comencé a preguntarme ¿cuál deberá ser el perfil psicológico de las madres que exponen a sus propias hijas a estas situaciones?, ¿cómo podrán ser esas niñas en la actualidad? y ¿cómo será su adultez?
Tenemos primero que pensar que la inocencia de las pequeñas se ve aplastada por los peinados, los brillos, las joyas caras, los estilistas, vestuaristas y los maquilladores todos al servicio de que la niña brille para ganar. Crecen así desde los dos años pensando que la única manera de ganar dinero es luciendo sus cuerpos, comienzan a sentir que el valor de cada una está en su cuerpo y en cómo lo muestran. Usan un vestuario sexualizado, lo que las vuelve el blanco perfecto de pedófilos y perversos.
Se crean niñas orientadas y promovidas a competir por ser las más lindas. Las menores son sometidas muchas veces a dietas para mantener sus figuras, dañando así desde la primera infancia el área de la alimentación, generándose posteriormente trastornos como anorexia, bulimia y depresiones asociadas.
Con estos concursos se introduce a la menor una gran carga de estrés, ya que la familia funciona en torno a la “niña que brilla”, las pequeñas se pasean con un caminar tembloroso sobre la pasarela, ellas deben cumplir a sus familias y “ganar” es lo más importante ¿cómo podrá tolerar esa niña las posteriores frustraciones propias de la vida?, quizás no lo logre y se refugie definitivamente en conductas de alto riesgo.
¿Cómo podrán socializar si las otras no son sus pares sino sus rivales? Son precisamente a quienes deben derribar para cumplir con las expectativas de sus madres, que ven realizar sus sueños y sus deseos frustrados, en sus hijas.
Desde mi punto de vista no existen justificaciones, estas niñas están siendo abusadas por el poder de sus padres y son vulnerables, muchos padres tendían a justificarse con frases como “quiero que la personalidad de mi hija brille” o “es para que desarrolle su personalidad y tenga mejor autoestima”. Le informo a los padres que eso no será así, ya que sus hijas necesitan jugar con muñecas, ensuciarse con barro, ir al colegio y saber que como personas valen mucho más que su apariencia, ya que cuando las princesas caigan de sus falsos castillos quedarán vacías, con una falsa autoestima, con una coraza de egocentrismo que muy poco les servirá para desenvolverse en el mundo real.
Revista Carrusel es un medio 2.0 dirigido a los padres, familias y educadores de niños en edad preescolar.
Especializados en tratar de forma cercana y útil temas de embarazo, desarrollo y psicología, salud y nutrición, educación inicial, actividades, manualidades y los mejores panoramas.Somos un medio que informa, pero que también escucha. Visítanos en www.revistacarrusel.com
