El gobierno dominicano criticó el miércoles el “manejo deficiente” que los medios de comunicación de Estados Unidos hicieron del caso de José Pimentel, acusado en Nueva York de planear acciones terroristas, así como el hincapié que le dieron al origen dominicano de este ciudadano.

“Las buenas relaciones entre Estados Unidos y República Dominicana permanecen inalterables, pese al manejo deficiente en los medios de comunicación norteamericanos de un elemento secundario, dada la gravedad de las acusaciones, como es el origen dominicano del señor Pimentel”, expresó la Cancillería.

Pimentel, un desempleado de 27 años convertido al Islam, fue presentado el domingo por la Policía de Nueva York como responsable de preparar bombas para atacar estaciones policiales, equipamientos de correos y militares estadounidenses llegados de misiones en el extranjero.

“Se ha hecho hincapié exageradamente en su calidad de dominicano por origen, cuando por tiempo de residencia, cultura y asimilación, su experiencia de vida dista de nuestras tradiciones y prácticas ciudadanas”, expuso la Cancillería.

Según las autoridades estadounidenses, el joven estaba supuestamente inspirado en su identificación con ideologías musulmanas y sus simpatías con la red Al Qaida para cometer los actos terroristas.

El comunicado resalta también que Dominicana ha mantenido comunicación constante sobre el caso con el embajador de Santo Domingo en Washington, Aníbal de Castro, porque las misiones diplomáticas en el extranjero tienen instrucciones de priorizar la atención a los nacionales que confronten dificultades.

“Estimamos (que) se ha dado precedencia a la nacionalidad norteamericana de Pimentel”, agregó el texto.

“En caso de solicitarlo y aunque sus conexiones culturales sean débiles con nuestro país, el gobierno dominicano le daría la debida asistencia legal a Pimentel”, recalcó la Cancillería, que a pesar de la gravedad del caso no considera que el mismo perjudique el prestigio de la comunidad dominicana en Estados Unidos.

Pimentel fue acusado formalmente de posesión de armas con fines terroristas, complot terrorista, apoyo a un acto terrorista y posesión de sustancias explosivas.

Sin embargo, su abogado denunció el lunes que el expediente del caso es poco sólido y, según el diario The New York Times, el FBI se negó a involucrarse en este expediente por la misma razón.