Este martes 31 de mayo se conmemora el Día Mundial Sin Tabaco, una iniciativa de la Organización Mundial de la Salud (OMS) destinada a recordar los grandes perjuicios que acarrea el consumo de cigarrillos en la sociedad. En este contexto, el estudio PLATINO, elaborado por la Asociación Latinoamericana del Tórax, dio a conocer impactantes cifras situando a Chile como el país líder en consumo de tabaco en la región por sobre Brasil, México, Uruguay y Venezuela.

La investigación centrada en identificar la prevalencia de la Enfermedad Pulmonar Obstructiva Crónica (EPOC) en Latinoamérica, indica que el 27,3% de los adolescentes chilenos comienzan a fumar entre los 13 y 15 años, mientras que el 28,9% lo hace a partir de los 16 ó 17 años de edad.

A los 18 años el 44% de los adolescentes que fuman son mujeres, mientras que sólo el 27% son hombres. Estos datos alertan sobre el riesgo de las mujeres a padecer infartos y accidentes cerebrovasculares, siendo ambas patologías la primera causa de muerte en Chile. Pero además incide en el peligro de padecer una trombosis (coágulos), asociada a la combinación de consumo de cigarrillos y anticonceptivos.

Al respecto el médico broncopulmonar de la Clínica Cordillera, Javier Cerda, explica que a nivel general, además del EPOC y las enfermedades cardiovasculares y el efisema, “un alto porcentaje de los fumadores también desarrollan cáncer pulmonar de esófago y laringe y la bronquitis crónica” y agrega que “a partir de estudios realizados en Japón, se ha indicado que tanto los fumadores activos como los pasivos pueden desarrollar las mismas enfermedades. La prevalencia es menor, pero el riesgo está y no puede dejarse de lado”.

El tabaco con sus más de cuatro mil agentes cancerígenos puede provocar una multiplicidad de patologías. A nivel mundial, según la Organización Mundial de la Salud, el consumo de tabaco provoca anualmente la muerte de cerca de seis millones de personas, lo más preocupante es que de éstas, más de 600 mil son fumadoras pasivas.

“En las embarazadas, concretamente, el consumo de cigarrillos de manera activa y pasiva puede determinar, además del surgimiento de los cánceres ya mencionados, el aumento al doble del riesgo de bajo peso del niño al nacer y triplicar las posibilidades de que éste sufra muerte súbita. El niño asimismo puede desarrollar enfermedades respiratorias”, añade Cerda.

¿Cómo frenar el tabaquismo?

Este martes el Gobierno enviará al Congreso la reforma que endurece la actual Ley Antitabaco, donde quedará estrictamente prohibido fumar en espacios públicos cerrados. La iniciativa ingresará con suma urgencia e incluye más fiscalizadores y multas en tramos progresivos, que incluso consideran el cierre del local infractor

Según el especialista de la Clínica Cordillera, “esto obliga a los fumadores a dominar sus impulsos y consumir menos. Pero los mayores beneficiados son los fumadores pasivos que así evitan su exposición al tabaquismo”.

Pero pese a este avance, la gran lucha de los médicos sigue centrada en encontrar un tratamiento eficaz para el tabaquismo. Para el broncopulmonar “hasta hoy la única opción es realizar un tratamiento multidisciplinario en el que -bajo la coordinación de un médico broncopulmonar-, el enfermo también reciba apoyo de un psiquiatra o un psicólogo. Para esto existen terapias farmacológicas con medicamentos específicos y también no farmacológicas”

Por su parte, el tratamiento con el cigarrillo electrónico, tal como explica Cerda, “no ha probado su efectividad, y no ha recibido respaldo de las sociedades médicas, ya que se ha señalado que posee elementos tóxicos que también son cancerígenos”

La clave para avanzar en el camino para dejar este vicio “es la actitud del paciente, que abra los ojos y se eduque para que comprenda a cabalidad lo nocivo que es fumar”, puntualiza Javier Cerda.