Activistas de apoyo a migrantes mexicanos exigieron el lunes detener la colocación de una malla metálica que divide a México de Estados Unidos, aprovechando que se cumplieron 20 años de la caída del ‘Muro de Berlín’, constató un periodista de la AFP.
Una veintena de activistas se reunieron el lunes por la noche en Playas de Tijuana (noroeste), ubicado en la línea que divide a ambos países en la costa del Pacífico, para exigir la reapertura diaria del Parque de la Amistad en San Diego (EEUU), donde por décadas familiares de ambos lados se reunían para platicar y en ocasiones tocarse las manos.
“Se restringió el acceso y no es permitido tocar a personas del otro lado, pues insisten que así se ha dado el contrabando de drogas, pero no existe evidencia, ni está documentado”, dijo Christian Ramírez, director en San Diego del Comité Amigos Americanos, a la AFP.
Desde hace 6 meses se impide el acceso diario y sólo se permite entrar el fin de semana, bajo la advertencia de que está “prohibido el contacto físico con personas en México”, indica un letrero del lado estadounidense.
La frontera entre México y Estados Unidos de cerca de 3.000 km, tiene construida una valla física de poco más de 1.000 km. Además, desde 2006 las autoridades estadounidenses instalan un sistema de vigilancia electrónica para impedir el paso de migrantes y droga.
“Este es un muro de la vergüenza, cuando se construyó hubo 140 muertos en un verano, hoy tenemos cifras de 10 mil (desde 1994), pero no queremos ni una muerte más”, dijo Enrique Morones, presidente de Ángeles de la Frontera.
El 9 de noviembre se conmemoraron 20 años de la caída del Muro de Berlín, construido durante la guerra fría, a partir de agosto de 1961.
